TRATAMIENTOS

Las tradicionales coronas metalocerámicas hasta ahora utilizadas ofrecen una óptima resistencia. No obstante, las propiedades de luminosidad y transmisión de la luz a través de la prótesis son diferentes cuando se compara con los dientes naturales debido a su estructura metálica, dando lugar a una opacidad mayor que sus piezas naturales y a la aparición en su sonrisa de esa antiestética línea negra entre la corona y la encía.

Anteriormente se tenía que aceptar el aspecto y la funcionalidad de la prótesis. Sin embargo, hoy en día los avances tecnológicos nos permiten restauraciones resistentes, estéticas y totalmente funcionales con las que puede sonreír libre de complejos, sin que nadie note su prótesis dental.

En Clínica Dental Aldaz tenemos la solución a esos problemas estéticos que le ofrecen estas prótesis convencionales, pues trabajamos con empresas punteras en el sector.

El zirconio es uno de los grandes avances científicos en cuanto a materiales odontológicos; con el empleo de la tecnología CAD-CAM (Computer Assisted Desing y Computed Assisted Machining) se consigue una morfología de la corona idéntica a la pieza natural.

Las coronas totalmente cerámicas proporcionan resultados estéticos más satisfactorios debido a su capacidad de transmisión de la luz, resistencia, belleza y estabilidad química. Los materiales que se utilizan ofrecen buenos resultados estéticos y funcionales, biocompatibilidad y costes ajustados.

Haciendo uso de esta tecnología, podemos diseñar todo tipo de prótesis recreando la emergencia natural de sus dientes con una reproducción fiel de la pieza perdida que responda mejor a las individualidades de su caso.

Esta combinación de diseño personalizado, métodos de producción avanzados y materiales biocompatibles permiten a nuestro equipo de profesionales conseguir un resultado altamente estético, durabilidad y estabilidad en el color en comparación con cualquier tipo de material restaurador.

Mejore su vida social y consiga una seguridad mayor en sí mismo optando por coronas de zirconio. Ni usted mismo notará la diferencia.